Kit de seguridad reglamentario en Costa Rica
El mantenimiento preventivo del vehículo básicamente consiste en una serie de pasos y procedimientos que verifican que los sistemas del auto estén operando dentro de los parámetros indicados, dichos sistemas incluyen: el motor, la transmisión, frenos, dirección, sistema eléctrico, y suspensión, además de otros más específicos como el líquido refrigerante, iluminación, escape y otros. Dichos sistemas deben ser evaluados con cierta frecuencia con la finalidad de prevenir accidentes, imprevistos, contratiempos y otorgarle al vehículo un mayor tiempo operativo.
Este mantenimiento preventivo, es una práctica recomendada que todo usuario vehicular debe realizar con cierta periodicidad, ya que otorga dos beneficios concretos: primero, se disminuye la posibilidad de que nuestro vehículo sufra algún desperfecto en el momento menos oportuno, y en segundo lugar se logra mantener la operatividad con la que el automóvil salió de fábrica.
Algunos procedimientos frecuentes y cotidianos de mantenimiento preventivo, que sin embargo son descuidados por muchos usuarios, incluyen el cambio de aceite y filtros, los cuales se deben hacer según las especificaciones del fabricante y dependiendo del motor, el cambio de aceite en la mayoría de los casos se debe hacer cada 15,000 a 30,000 km recorridos, o en todo caso por lo menos una vez al año. De igual forma, el cambio de filtros, tanto del combustible como del aire es algo que no debemos descuidar.
Una buena filosofía de mantenimiento preventivo garantiza la seguridad vial de nuestro vehículo, en tal sentido también deben ser revisados periódicamente los neumáticos, los cuales tienen un tiempo de vida útil, de igual manera los amortiguadores deben ser revisados aproximadamente cada 40,000 km, o incluso menos si es que nuestro automóvil habitualmente carga peso extra.
En el caso de los frenos, se deben revisar las pastillas y los discos los cuales se desgastan con el uso y pierden grosor, también debemos vigilar el sistema de luces, los focos deben iluminar adecuadamente y los faros permanecer transparentes, el parabrisas debe mantenerse sin rajaduras u otros incidentes que disminuyan la visibilidad. Estos son solo algunos de los muchos elementos que debemos vigilar constantemente como parte del mantenimiento preventivo de nuestro automóvil.
En Rojassa, contamos con un equipo de técnicos altamente entrenados, que conocen las características y propiedades de cada marca automotriz, además de tener las herramientas ideales y adecuadas, para cada marca y modelo específico. De esta forma podemos realizar un mantenimiento preventivo correcto a su vehículo, evitándole molestias – y mayores gastos – a futuro, también estaremos gustosos en asesorarlo acerca de cómo mantener su vehículo en las mejores condiciones.
Recuerde que es vital siempre andar adelante, estando atento a estos pequeños pero importantes detalles y salvar la vida nuestra y la de nuestros seres queridos.
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